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75? aniversario de los bombardeos at車micos de Hiroshima y Nagasaki: Es hora de acabar con la amenaza nuclear

Se ha formado una red de acuerdos e instrumentos para prevenir el uso de estas armas singularmente destructivas y, en 迆ltima instancia, para eliminarlas. No obstante, ese marco ha permanecido inactivo durante d谷cadas y est芍 empezando a erosionarse. El potencial de que se lleguen a utilizar las armas nucleares, ya sea de forma intencionada, por accidente o como resultado de un error de c芍lculo, es peligrosamente alto.  

Como consecuencia de las crecientes tensiones internacionales y la disminuci車n de la confianza, las relaciones entre los pa赤ses poseedores de armas nucleares est芍n evolucionando hacia confrontaciones peligrosas y desestabilizadoras. Mientras los Gobiernos se apoyan considerablemente en las armas nucleares para su seguridad, los pol赤ticos intercambian declaraciones acaloradas sobre su posible uso y dedican grandes sumas de dinero a mejorar su letalidad, un dinero que ser赤a mucho mejor gastar en un desarrollo pac赤fico y sostenible.  

Durante d谷cadas, los ensayos nucleares han tenido horribles consecuencias humanas y ambientales. Esta reliquia de una 谷poca anterior deber赤a ser confinada al pasado para siempre. Solo una prohibici車n legalmente vinculante y verificable de todos los ensayos nucleares puede lograrlo. El Tratado de Prohibici車n Completa de los Ensayos Nucleares ha demostrado su valor, pero algunos Estados todav赤a no lo han firmado o ratificado, lo que impide que alcance todo su potencial como elemento esencial del marco para la eliminaci車n de las armas nucleares.  

Junto con el cambio clim芍tico, las armas nucleares representan una amenaza existencial para nuestras sociedades. La mayor parte de las aproximadamente 13.000 armas nucleares que existen actualmente en los arsenales mundiales son mucho m芍s destructivas que las bombas lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki. Cualquier uso desencadenar赤a un desastre humanitario de proporciones inimaginables.  
Ha llegado el momento de volver al entendimiento com迆n de que una guerra nuclear no se puede ganar y no se debe librar nunca, al acuerdo colectivo de que debemos trabajar por un mundo libre de armas nucleares y al esp赤ritu de cooperaci車n que permiti車 lograr progresos hist車ricos con miras a su eliminaci車n.  

Se espera que los Estados Unidos y la Federaci車n de Rusia, en su calidad de poseedores de alrededor del 90 % de las armas nucleares, abran camino en este sentido. El ※Nuevo Tratado START§ mantiene l赤mites verificables. Su pr車rroga por cinco a?os permitir赤a ganar tiempo para negociar nuevos acuerdos, incluida la posible participaci車n de otros pa赤ses poseedores de armas nucleares.  

El pr車ximo a?o, las Naciones Unidas organizar芍n la Conferencia de las Partes encargada del Examen del Tratado sobre la No Proliferaci車n de las Armas Nucleares (TNP), uno de los acuerdos de seguridad internacional que han tenido m芍s 谷xito. En 谷l figuran los 迆nicos compromisos basados en un tratado que han asumido los cinco mayores pa赤ses poseedores de armas nucleares con miras a su eliminaci車n y se imponen obligaciones verificables de no adquirir ni desarrollar armas nucleares. El hecho de que casi todos los pa赤ses formen parte del Tratado significa que la inmensa mayor赤a de la comunidad internacional est芍 vinculada por estos compromisos. La Conferencia de Examen del Tratado sobre la No Proliferaci車n es una oportunidad para detener la erosi車n del orden nuclear internacional.  

Afortunadamente, la mayor赤a de los Estados Miembros de las Naciones Unidas sigue comprometida con el objetivo de un mundo libre de armas nucleares. Este compromiso se refleja en los 122 pa赤ses que apoyaron la aprobaci車n del Tratado sobre la Prohibici車n de las Armas Nucleares. Estos pa赤ses entienden que las consecuencias de cualquier uso de armas nucleares ser赤an catastr車ficas. No podemos arriesgarnos a una repetici車n de Hiroshima o Nagasaki o algo peor. Al tiempo que reflexionamos sobre el sufrimiento de los hibakusha, debemos ver esta tragedia como un clamor para la humanidad y comprometernos de nuevo con un mundo libre de armas nucleares.
via: Japan News by the Yomiuri Shimbun